Alves: Intermitente. A pesar del gol en propia puerta, tuvo buenas acciones defensivas, especialmente en la primera parte; pero según se iba descontrolando el partido, el spartak encontró demasiados espacios por su banda.
Piqué: Lesionado. Hasta su lesión, apenas tuvo problemas.
Song: Desubicado. No es fácil ser central en el Barça y menos cuando tu compañero es también un central reconvertido. Apoyado en su fuerza física, ayudó lo que buenamente pudo.
Mascherano. Irregular. Partido perfecto hasta la lesión de Piqué, pero con serios problemas cuando el equipo se partía y los espacios se multiplicaban.
Adriano: Blando. Le abandonó la astucia, su principal característica defensiva, en el segundo gol del Spartak. En ataque ayudó en la medida de lo posible.
Busquets: Omnipresente. Aunque sufre una barbaridad en defensa cuando el Barcelona no controla el ritmo del partido, es tan súmamente bueno en ataque que poco se le puede reprochar.
Xavi: Estelar. Casi idéntica lectura a la de Busquets, su socio en el partido ante la desaparición de Cesc. Tito debe guardar bien su sensacional estado físico actual.
Cesc: Calamitoso. Su lamentable enésimo partido como interior, sólo sería comprensible si Tito le pide que, una vez toque, se vaya embalado hacia la portería, cosa que dudo mucho. El Barça como interior no le necesita, y para colmo cada día va a peor. Thiago llama a la puerta con fuerza.Pedro: Trabajador. Sigue en su línea, es decir, trabajando para todos sin esperar nada a cambio. Ofrece una amplitud de campo y un aporte defensivo que sólo parece a su alcance.
Messi: Matador. Fue muy poco Messi y muy Ronaldo (el único). Desacertado en el juego pero letal de cara a gol. Se fabricó una que él mismo falló, pero en las dos siguientes no perdonó.
Tello: Prometedor. Continúa en clara progresión. Está centrado y lee cada vez mejor las necesidades del equipo. Además colaboró en el marcador con un golazo y una asistencia.
Villa: Desacertado. Apenas está gozando de minutos, además falló una ocasión clarísima con empate a dos en el marcador. Llegarán tiempos mejores y más tranquilos para el equipo y también para él.
Alexis: Decisivo. Su entrada propició el caos en la defensa del Spartak. Cuando Messi es el más adelantado, los dos centrales y los dos o tres mediocentros se ocupan casi exclusivamente de él. Con la salida de Alexis los centrales dudaron y recularon varios metros, lo que propició que Messi se liberara y que las llegadas se produjesen en el área. Con el argentino libre, Alexis delante de él, y los extremos llegando a línea de fondo, la lógica se impuso y el Barcelona se llevó el partido.