Sólo unas semanas después la sátira se hacía realidad, aunque esta vez el personaje era un enviado de Pedrerol. La jugada consistía en, presidente de L'Hospitalet mediante, tratar de sonsacar ilícitamente cualquier información negativa de Guardiola para así poder poner el ventilador de la mierda a funcionar. Una vez más la frustración se cruzó en el camino de Pedrerol. Hacer un ridículo tan bochornoso para sacar un mísero "no tenemos ni puta idea, sólo lo sabe él", tuvo que hacerle hasta valorar seriamente si encender el ventilador o no.
La junta del club no pasó por alto el detalle y ha retirado la acreditación a la cadena fascista de televisión. Puede ser que los más beneficiados sean los propios personajes que protagonizan el programa satírico (Crackovia no, el otro), dado que por fin cuentan con un pretexto para seguir intentando degradar al Barcelona. En cualquier caso hay ocasiones en las que, por garantizar la salud y el bienestar de tu entrenador y de tu equipo, conviene hacer limpieza y por si acaso, sacar la basura.