Demasiados periodistas y programas deportivos, amén de los espectáculos nocturnos sobre la polémica en el fútbol, apuntaron a que la opción escogida por Guardiola era Alemania, porque de esa manera no iba a tener que enfrentarse a Mourinho (en liga se supone); en otras palabras, que Pep tiene miedo de Mou.
A ciertos periodistas y personajes de la radio o de la tele, convendría recordarles que el saludo de Pep a Mourinho, una vez que coincidieron en la misma liga, fue un 5-0 histórico en el Camp Nou. En el partido de vuelta, en el Bernabéu, el resultado fue un empate a uno que dejaba en bandeja La Liga al Barcelona. En la final de Copa de ese año sí que se impuso el Madrid, pero todos recordamos cómo. En la Champions, el Barcelona de Guardiola dejó la eliminatoria sentenciada en el partido de ida en el Bernabéu.
En la temporada 2011-2012, la segunda y última que coincidieron, comenzó con un empate en el Bernabéu en el partido de ida de la Supercopa. En la vuelta se impuso el Barça y se llevó el título. En liga mitad y mitad, el partido del Bernabéu para el Barça, y el del Camp Nou para el Madrid. En la Copa, nueva victoria en el Bernabéu, y empate que en el Camp Nou que otorgaba el pase a la siguiente ronda al Barcelona.
Entre medias: agresiones, amenazas, continuos lloriqueos, y el hecho más cobarde de todos, las vacaciones concedidas al jardinero del Bernabéu previas a las visitas del Barcelona. Con lo cual, si ha habido un entrenador estos dos años que ha demostrado miedo y cobardía, tanto dentro como fuera del campo, ese ha sido el señor José Mourinho, y no Guardiola como muchos intentan vender.